La inteligencia artificial (IA) se perfila como una herramienta crucial en la lucha contra el cáncer de mama en América Latina. En un encuentro virtual organizado por Diálogos EFE, expertos en salud y tecnología analizaron su potencial impacto y los desafíos que enfrenta su implementación en la región.
Participaron Daniel Otzoy García, CEO de Recainsa; Alberto Hegewisch, director de diagnóstico de AstraZeneca; la doctora Claudia Arce, especialista en cáncer de mama; y el doctor Santiago March, coordinador del Consejo Promotor de Nuevas Tecnologías en Funsalud.
Los especialistas coincidieron en que, aunque la IA está en una fase inicial de adopción, tiene el potencial de transformar la atención médica en una región donde, según Globocan Cancer Observatory, en 2022 se registraron más de 220.124 casos de cáncer de mama y cerca de 59.876 muertes, situándose como la cuarta causa de mortalidad por esta enfermedad.
Otzoy destacó que «América Latina ya cuenta con experiencias prácticas y algunos países han incorporado la IA en sus políticas públicas».
Añadió que «la IA se está empleando para reducir listas de espera, facilitar el acceso a tratamientos y diagnósticos, e incluso en el análisis de imágenes para la detección del cáncer de mama».
Hegewisch subrayó que el rol de la IA en la medicina de precisión «permite identificar patrones y desarrollar terapias más efectivas. También puede asistir a los patólogos en la detección de patrones histológicos en biopsias, acelerando el proceso diagnóstico».
La doctora Arce, citando un estudio de la revista Oncologist, indicó que en Latinoamérica entre el 15 y el 30 % de los casos de cáncer de mama se detectan en etapas avanzadas. Enfatizó que la IA podría optimizar los tiempos de atención y mejorar la eficiencia al «integrar información sobre síntomas, factores de riesgo y características genéticas para establecer una estrategia terapéutica adecuada y personalizada».
Arce añadió que «la IA no solo ayuda a diagnosticar más temprano, sino que permite al clínico decidir el mejor tratamiento basado en medicina personalizada», y afirmó que «con un diagnóstico oportuno y un tratamiento adecuado, el cáncer de mama puede ser curable».
Sin embargo, el doctor March advirtió que si un país intenta avanzar en digitalización comenzando por la IA sin antes establecer pilares fundamentales como la telemedicina, el expediente clínico electrónico y la receta digital, «el camino será muy complejo».
También señaló que, para una implementación exitosa, es necesaria la validación de tecnologías y algoritmos de IA desarrollados en otros países dentro del contexto local, ya que las pacientes «tienen un trasfondo genético y un entorno ambiental diferentes».
A pesar de estos desafíos, ya existen iniciativas que buscan incorporar la IA en la lucha contra el cáncer. En México, por ejemplo, Funsalud lidera una coalición con All.Can para identificar ineficiencias en la atención y desarrollar proyectos que mejoren los tratamientos, además del Proyecto Código Cáncer, una estrategia integral para el diagnóstico temprano y tratamiento oportuno.
En otro ámbito, la asociación también trabaja en un proyecto de cardiología que pretende desarrollar un modelo de IA para mejorar la detección de la trombosis coronaria total.
La IA como herramienta para una atención médica más equitativa
Según un informe de Pro Mujer publicado en 2023, en zonas de mayores ingresos solo el 10 % de los casos de cáncer de mama se detectan en etapas avanzadas, mientras que en áreas vulnerables esta cifra asciende al 50 %.
Por ello, la doctora Arce subrayó que «es esencial que la IA llegue a todos los países de América Latina y que todos los pacientes, independientemente de su ubicación o condición socioeconómica, puedan beneficiarse».
Asimismo, Hegewisch explicó que «es importante integrar el uso de la inteligencia artificial en el sistema de salud. Las herramientas digitales y el expediente clínico nos ayudan a mejorar la atención al paciente y permiten reducir el tiempo en que personas que desconocían su enfermedad reciban un diagnóstico temprano. Así, podrán acceder a terapias adecuadas y podremos erradicar el cáncer de mama como causa de muerte en la región».